Fuente:
Cien temas del folklore peruano
Alejandro Vivanco
Lima, 1988, pp. 77-78
Alejandro Vivanco
Lima, 1988, pp. 77-78
...............................
El Kcajelo o Ckara Botas
Símbolo de virilidad y rebeldía aymara
El "Kcajelo" es una de las más auténticas y representativas manifestaciones del folklore puneño. Es el baile de un bravío jinete que con aire de dominio absoluto sobre su bella pareja hace una serie de requiebros, látigo en mano, al compás de una música alegre.
Hay diversas versiones sobre el origen de este baile, que se resiste a ser mistificado y "modernizado" por corrientes empeñadas en confundir lo populachero con la autenticidad folklórica.
Según el doctor Emilio Romero, quien escribió un comentario sobre "Réquiem para un Ckara-Botas" de Edgard Valcárcel ("El Comercio", 25 de Julio de 1,973), afirma que el nombre de Ckara-Botas o Kcajelo se debe a los bravos jinetes que domaban una raza remota de caballos salvajes, para tomar parte en las grandes cacerías o para los rodeos del ganado silvestre.
Dice el autor que el espíritu y la leyenda del jinete bravío fue captada y conservada por el pueblo aymara, de las orillas del Titicaca; que cantó y lloró a los héroes de las punas; recogió su tradición, la convirtió en música y la interpretó en sus danzas costumbristas.
Hay diversas versiones sobre el origen de este baile, que se resiste a ser mistificado y "modernizado" por corrientes empeñadas en confundir lo populachero con la autenticidad folklórica.
Según el doctor Emilio Romero, quien escribió un comentario sobre "Réquiem para un Ckara-Botas" de Edgard Valcárcel ("El Comercio", 25 de Julio de 1,973), afirma que el nombre de Ckara-Botas o Kcajelo se debe a los bravos jinetes que domaban una raza remota de caballos salvajes, para tomar parte en las grandes cacerías o para los rodeos del ganado silvestre.
Dice el autor que el espíritu y la leyenda del jinete bravío fue captada y conservada por el pueblo aymara, de las orillas del Titicaca; que cantó y lloró a los héroes de las punas; recogió su tradición, la convirtió en música y la interpretó en sus danzas costumbristas.
Se cree que, el Ckara-Botas (botas de cuero) podría haberse originado en los días de la rebelión de Túpac Amara que, por algún tiempo, se extendió a las mesetas puneñas. Los comuneros y yanaconas se habrían bautizado "ckara-botas", irónicamente porque imitaban las botas finas de los españoles. Para nuestro autor es, pues, signo de libertad y por eso en sus hazañas aparece blandiendo el zurriago de cuero y haciendo resonar sus espuelas.
En nuestro deseo de indagar aún más sobre este personaje legendario de Puno, logramos entrevistar a un intérprete maestro radicado en Lima.
Un domingo abordamos en el "Coliseo Cerrado" del Puente del Ejército a Gerardo Barboza, conocido precisamente, como "Kcajelo" por sus constantes presentaciones en público. El es técnico tributario y habla aymara. Escuchemos su narración:
Nací en Puno, distrito de Pomata, provincia de Chucuito. Yo bailo el kcajelo desde la edad de ocho años; mi padre, que era arriero, me llevaba a las alturas y allí conocí a los Kcajelos auténticos. Llevo el baile en la sangre, vivo el ambiente de los lugares donde aprendí; mis pasos no son estudiados, porque nadie me enseñó.
¿Sabe usted?, el baile se vive, no se aprende. En 1966 me presenté por primera vez, con temor, en un teatro de Lima, con el aliento del doctor José María Arguedas. Mi primera pareja fue Soledad Malpica, una muchacha limeña muy inteligente que aprendió el baile a la perfección. Actualmente bailo con María Elena Arias Castillo, que perteneció a la compañía "Sumaq Inti".
Preguntamos a Barboza sobre las zonas de influencia del baile, las ocasiones en que se presenta, sobre su contenido y la presencia de la mujer.
En nuestro deseo de indagar aún más sobre este personaje legendario de Puno, logramos entrevistar a un intérprete maestro radicado en Lima.
Un domingo abordamos en el "Coliseo Cerrado" del Puente del Ejército a Gerardo Barboza, conocido precisamente, como "Kcajelo" por sus constantes presentaciones en público. El es técnico tributario y habla aymara. Escuchemos su narración:
Nací en Puno, distrito de Pomata, provincia de Chucuito. Yo bailo el kcajelo desde la edad de ocho años; mi padre, que era arriero, me llevaba a las alturas y allí conocí a los Kcajelos auténticos. Llevo el baile en la sangre, vivo el ambiente de los lugares donde aprendí; mis pasos no son estudiados, porque nadie me enseñó.
¿Sabe usted?, el baile se vive, no se aprende. En 1966 me presenté por primera vez, con temor, en un teatro de Lima, con el aliento del doctor José María Arguedas. Mi primera pareja fue Soledad Malpica, una muchacha limeña muy inteligente que aprendió el baile a la perfección. Actualmente bailo con María Elena Arias Castillo, que perteneció a la compañía "Sumaq Inti".
Preguntamos a Barboza sobre las zonas de influencia del baile, las ocasiones en que se presenta, sobre su contenido y la presencia de la mujer.
Es un baile universal en la zona cordillerana de Chuchito, Pichacani, hasta Tacna. Constituye una faja de montañas, aunque tiene mayor auge en el distrito de Acora. Siempre está presente en las fiestas religiosas.
El Kcajelo tiene su mundo, su propia filosofía; lucha con las fuerzas de la naturaleza para subsistir, no conoce e! miedo. Al personaje no le falta su "kirki" (charango) y siempre está sobre su caballo "Choqcha". Aparenta humillación ante el gamonal poderoso, pero en su idioma replican diciéndole: "también eres un perro..."
Yo conocí un Kcajelo famoso, Honorio Peñaranda Catacora, que cantaba con su charango:
El Kcajelo tiene su mundo, su propia filosofía; lucha con las fuerzas de la naturaleza para subsistir, no conoce e! miedo. Al personaje no le falta su "kirki" (charango) y siempre está sobre su caballo "Choqcha". Aparenta humillación ante el gamonal poderoso, pero en su idioma replican diciéndole: "también eres un perro..."
Yo conocí un Kcajelo famoso, Honorio Peñaranda Catacora, que cantaba con su charango:
de los cerros nevados llego
con mi poncho de escarchas
con ojotas de hielo "chullumpaja"
mi abuelo es cóndor
está bien mi abuela también.
El Kcajelo baja de las alturas con su charqui, leña, correa, reata, para hacer trueque con productos alimenticios. Es gente muy honrada de la región. Sin embargo, algunos confundiendo su machismo lo califican de abigeos. Eso es falso.
Frente a la mujer amada su conducta es peculiar. De allí su fama de raptores. No enamora con palabras dulces y suaves; es audaz y tosco con la mujer que lo desdeña, pero que al final siempre es vencida. Existe el sirvinakuy y hay una costumbre original para que el Kcajelo forme familia.
Elegida la muchacha, el mozo busca una persona influyente para que sea su padrino. El se encarga de pedir la mano o "sartasiri". El "casarasiri" es la boda.
El padre de la futura novia dice: "si han venido a buenas qué se va hacer". Llaman a la muchacha que a veces se resiste. Es cuando el padre decide. Al fin y al cabo, el kcajelo siempre se lo lleva esa misma noche, con la condición de que la boda sea al día siguiente. Esa noche la muchacha queda en la casa del segundo padrino ("apadrino").
Al día siguiente se entrega al primer padrino y los novios se dirigen al pueblo a casarse. Después de la boda, la joven pareja es encerrada en un cuarto y cuando amanece el padrino llega hasta allí látigo en mano, con el que le golpea fuerte al flamante esposo para que se porte bien con su pareja. El ahijado agradece. La fiesta termina con la entrega de "Apq'atas" o regalos para que los recién casados armen su hogar.
Si se presenta conflictos entre ellos, el padrino tiene autoridad para la reconciliación e imponer justicia. Los padres casi nunca intervienen.
con mi poncho de escarchas
con ojotas de hielo "chullumpaja"
mi abuelo es cóndor
está bien mi abuela también.
El Kcajelo baja de las alturas con su charqui, leña, correa, reata, para hacer trueque con productos alimenticios. Es gente muy honrada de la región. Sin embargo, algunos confundiendo su machismo lo califican de abigeos. Eso es falso.
Frente a la mujer amada su conducta es peculiar. De allí su fama de raptores. No enamora con palabras dulces y suaves; es audaz y tosco con la mujer que lo desdeña, pero que al final siempre es vencida. Existe el sirvinakuy y hay una costumbre original para que el Kcajelo forme familia.
Elegida la muchacha, el mozo busca una persona influyente para que sea su padrino. El se encarga de pedir la mano o "sartasiri". El "casarasiri" es la boda.
El padre de la futura novia dice: "si han venido a buenas qué se va hacer". Llaman a la muchacha que a veces se resiste. Es cuando el padre decide. Al fin y al cabo, el kcajelo siempre se lo lleva esa misma noche, con la condición de que la boda sea al día siguiente. Esa noche la muchacha queda en la casa del segundo padrino ("apadrino").
Al día siguiente se entrega al primer padrino y los novios se dirigen al pueblo a casarse. Después de la boda, la joven pareja es encerrada en un cuarto y cuando amanece el padrino llega hasta allí látigo en mano, con el que le golpea fuerte al flamante esposo para que se porte bien con su pareja. El ahijado agradece. La fiesta termina con la entrega de "Apq'atas" o regalos para que los recién casados armen su hogar.
Si se presenta conflictos entre ellos, el padrino tiene autoridad para la reconciliación e imponer justicia. Los padres casi nunca intervienen.
...............................
Caballito cchogchiporqe
Centro Musical Theodoro Valcarcel
subido por folclore peruano
3 k'ajelos
Estudiantina de la Asoc. Brisas del Titicaca
1 Charanguito- Paulino Tavera (música) Javier Salas (letra)
2 Mayordomo solitario - M. Neyra
3 Canario - D.R.
subido por Gian C
--------------------
Letras de tres kajelos
Mi cawallo y mi mujera
[el mensaje de esta canción expresa los valores machistas del k'arabotas]
Mi cawallo y mi mujera
se han perdido al mismo tiempo
yo no lloro por la mujera
más me lloro por la cawallo
Esa cawallo me llevaba
de una mujera a otra mujera
esa cawallo cuesta plata
la mujera no vale nada
[...]
Mis sueños(*)
Añoche soñé vidita
que dos negros me mataban (bis)
esos dos negros vidita
eran tus ojitos negros (bis)
Soñé que la nieve ardía
soñé que el fuego se helaba (bis)
al soñar con lo imposible
soñé que tú me querías (bis)
Añoche soñé vidita
que dos gringos me mataban (bis)
esos dos gringos vidita
eran tus ojitos verdes (bis)
Soñé que la nieve ardía
soñé que el fuego se helaba (bis)
al soñar con lo imposible
soñé que tú me querías (bis)
Genarita
Genarita, chachacomita
piedra de mis dolores tú,
como puñal de asesino
hermosa, esquiva y huraña
Los bordones de mi charango
cantan llorando y maldicen
así canto, lloro y maldigo
la hora de haberte querido
El día en que tú te cases
de los panteones he de volver
a cambiarte tus azahares
por mis lágrimas saladas
..................................
(*) La segunda estrofa de esta canción, recoge versos de una jota aragonesa muy popular, presente también en el tema "Nieve en los Andes": "En el alto el Pirineo/ soñé que la nieve ardía,/ y por soñar imposibles,/ pensé que tu me querías"
.....................................
Enlaces:
Kajelo de Chumbivilcas - distrito de Pallpata, Cusco
Espíritu bohemio en la inmensidad de la puna
Diccionario etnolingüístico y guía bibliográfica de los pueblos indígenas sudamericanos: Aymara - Alain Fabre (2005)